Aldea "De la Rosa"

por **Shion** Dom Dic 16, 2012 3:58 pm

Un alto precio eh pagado al haber usado mi tecnica mas poderosa... El frio de lo inmaterial caia rebosante sobre mi ser, mi cuerpo en su estado casi vegetal de a poco se recuperaba de aquel cara a cara con el universo manifestado en los elementos, exclamando lo que por derecho le pertenece... Ciertamente en mi estado de sueño levemente vegetal había perdido toda noción del Tiempo... Despues de mucho vagar en mi profunda conciencia una luz comenzó a reflejarse en mis parpados, era el sol que brillaba sobre mi rostro retirando el oscuro frió de la sombra que jugaba de a poco con mi cuerpo... Comencé a sentir de nuevo... Mi armadura no estaba sobre mi cuerpo, había sido retirada, quizás por su propia voluntad, Sobre mi piel descansaba una sutil manta que con gentileza me brindaba su calor...

Poco a poco abri mis Parpados un ligero Olor a rosas invadió la habitación, era una pequeña Choza con tan solo 2 camas, a mi Lado estaba Yuzuriha que con preocupación me veia o eso pude ver... Intente levantarme pero tanto tiempo inconsciente me impedía usar mis habilidades motoras al máximo... Desconcertado pregunte aun con mi cabeza reposando sobre mi almohada...

- Yuzuriha, ¿Que paso?...

Vi su rostro reflejando cansancio en el mio, claramente no estaba del todo despierto pero tampoco sabia que era lo que pasaba, ¿Salvamos la Aldea? Si asi fue ¿Que hacemos en este lugar rodeado de Rosas?... Mi respiracion estaba un poco fuera de si, estaba nervioso y a la vez ligeramente ansioso por recuperar mi movilidad a plenitud...

OFF:

Aldea de la Rosa: Un Lugar de 25 Habitantes, se encuentra en las praderas de las afueras de los bosques montañosos, Aqui habitan diversos curanderos por lo tanto la variedad de Flores, Rosas y Hierbas medicinales abunda tanto como los guerreros que suelen ser curados alli...

Spoiler:

por **Yuzuriha** Dom Dic 16, 2012 4:52 pm

Ya había pasado varios días desde que estábamos allí, desde aquella tormenta que había borrado a una aldea entera y la que había producido que Shion manifestara un gran poder, desde ese día el dormía, al parecer de manera placida abrigado con su manta, yo por mi parte no había podido dormir, estaba cansada, pero no dejaría de vigilar su sueño

Mientras lo observaba, trataba de pensar en el poder que había usado, pude sentir una energía antes que se escuchara el estallido, pero no me explicaba que era eso. Lo bueno que la lluvia ceso y los aldeanos regresaron al lugar al que alguna vez llamaron hogar, nos vieron allí y ofrecieron su ayuda, según ellos era lo mínimo que podían hacer. Yo no sentía que ellos estuvieran en deuda, ayudarlos era una acción que cualquier persona hubiera hecho, yo no había hecho nada, el que nos había salvado a todos era Shion…

De repente escuche su voz, al fin había despertado, la alegría me embargo estaba muy preocupada por el, pero los curanderos del lugar me habían dicho que el estaba así porque uso su energía y que solo necesitaría descansar, así sanaría el mismo.

¿Me preguntas que paso? Yo soy la que debería preguntarte eso, ¿como hiciste eso? ese gran poder que sentí ¿qué fue?- dije en respuesta de su pregunta- De manera resumida, nos salvaste a todos, desviaste la avalancha y creaste un gran cráter en el lugar. Los aldeanos llegaron al amanecer a su aldea y me ayudaron a traerte aquí, ellos se establecerán en un lugar mas seguro y la pequeña a la que ayudaste ira a Ba Sing Se con su familia, creo que ya no quieren saber nada de estos lugares- lo observe seguía recostado sobre la almohada, si tardaría un poco en recuperar sus energías, era normal llevaba varios días dormido, por lo demás, según los curanderos del lugar, no tenía nada grave.

Estamos en la aldea de las Rosas, aquí viven muchos curanderos, los que nos han ayudado, afortunadamente de manera económica, eso es debido a tu acción heroica- dije contándole en el lugar que nos encontrábamos, me puse de pie y acerque su caja- Pero…tu armadura no se que le ocurre, perdió su brillo desde que quedaste inconsciente en la aldea, es como si estuviera muerta, lo siento, no supe que hacer, una vez que llegamos aquí se desprendió de tu cuerpo.- Dije mostrándole una de las piezas, ahora sin brillo de su armadura. Sabia que eso debía ser difícil, ver aquella armadura que una vez fue hermosa en aquel estado.

Creo que debes tener hambre, iré por algo para comer- puse la pieza de su armadura en la cama donde el estaba y sali de la habitación, algo de comer nos haría bien a ambos, aunque me culpaba por lo de su armadura, quizá hice algo incorrecto, o deje de hacer algo, solo esperaba que tuviera solución aquello.

por **Shion** Dom Dic 16, 2012 9:36 pm

Mi cabeza permanecía en estado de reposo encima de aquella suave almohada lo unico que no seguia calmado era la voz de Yuzuriha quien con rapidez, intriga y algo de emocion se dispuso a responder mi pregunta o mas bien a preguntarme a mi, tal parece ni ella misma comprendia lo que ocurria, No es para menos aquello que hice era quizas unico sobre la faz de la Tierra, controlar los cristales dentro de las rocas, hacer que brillen asi, expresar su poder... Incluso yo tenia mis dudas sobre si eso en verdad paso, dudas que en segundos Yuzuriha despejo de mi mente al actualizar la situacion en la que nos encontrabamos... Coloque mi mano derecha sobre mis ojos casi como si limpiara estos para luego acariciar mi rostro con la misma...

- Eso... Hay muchas cosas aun que debo contarte Yuzuriha... Eso que viste fue mi tecnica mas poderosa, la aprendi del diario de mi padre y me tomo años si quiera levantar un solo cristal... Tsk...

Algo de tos se habrio paso en mi boca impidiendo terminar mis palabras, aun estaba realmente debil, tenia dias sin haber comido, algo de comida no me caería mal, cuando de pronto vi algo que realmente me impacto... Mi armadura... En que estado estaba... no podía creerlo, sin embargo no era el fin de ella, sabia que hacer solo que aun necesita de los nutrientes que hicieran de mi sangre mas pura...

- Mi... Armadura... Esta bien Yuzuriha, ve por algo de comida...

Vi con tristeza mi Armadura, logre sentarme en la cama revelando mi torso... Mi camisa no estaba y tenia un extraño olor a Hierbas, ¿ habrán sido las plantas las culpables de haberme sanado ? Tal parece asi fue... simplemente coloque mi mano en mi pecho y sonrei, soy una persona afortunada, que habria sido de mi sin Yuzuriha, es como si fuera una Hermana para mi, este sentimiento, este lazo... (* Jm... Gracias Yuzuriha... *) En mis manos tenia aquella pieza de mi armadura, carente de brillo y vida... Aun podia escucharla hablarme ya solo era cuestion de tiempo para repararla...

Yuzuriha regreso con alimentos envueltos en una especia de servilleta de tela, de hecho eran dos de estas, era comida para mi y por supuesto para ella, ha sido muy amable conmigo, debia agradecerle, le sonrei y tome mi comida, destape esta la cual contenía Arroz con trozos de Chuleta de cerdo, Me entrego un vaso, era un Té medicinal, para recobrar fuerzas... Tome algo de arroz y lo coloque en mi boca para luego tragar el mismo...

- Muchas Gracias Yuzuriha... Por cuidarme mientras estuve indispuesto... Estos dias... ¿Cuantos fueron?

Una sonrisa permanecía dibujada en mi rostro, mi mirada irradiaba aprecio, no todos los dias alguien dedica tiempo para velar tu sueño... Pero mas alla de eso podia sentir la gran Grulla que bañaba con su poder el ser de Yuzuriha... Jm... Quizas deberiamos entrenar un poco, ella tenia mucho potencial.

por **Yuzuriha** Lun Dic 17, 2012 8:47 am

Mientras cerraba la puerta tras de mí, recordaba las palabras de Shion: que era esa técnica poderosa, realmente lo era nunca había visto esa manifestación de poder en ningún maestro en el pasado, ni siquiera mi hermano que era un prodigio en tierra control podría haber logrado eso sobre la tierra, era algo realmente impresionante.

También estaba el hecho de que su armadura estuviera en ese estado, no comprendía que le había pasado, realmente esperaba que se pudiese restaurar, debía haber alguna forma de hacer eso. La mirada de tristeza en sus ojos, me hizo saber que el tampoco comprendía lo que le había pasado a su armadura.

Camine por el pasillo de la casa en la que nos hospedo un amable curandero, el cual había aceptado recibirnos por las acciones de Shion, ya que uno de sus familiares era un aldeano que precisamente nos llevo hasta ahí.

Buenos días señor- salude al llegar a la cocina, el se encontraba ahí, como todos los días preparando alguna de sus medicinas naturales, esta vez parecía ser que era una infusión de te. El me había permitido hacer uso de la cocina cuando la necesitase, así que comencé a preparar los alimentos que le llevaría a Shion, algo de arroz con chuleta de cerdo que eran del día de ayer, así que solo bastaba con recalentarlos, realmente no sabía si sería de su agrado, pero esos alimentos se encontraban ahí, esperaba realmente que le gustaran.

Buenos días ¿cómo se encuentra el joven Shion?- dijo el curandero sin distraerse de su trabajo, del cual no sabía el nombre, no me parecía extraño, mucha gente omitía su identidad por miedo a ser encontrados por la Nación del Fuego.

Acaba de despertar, por eso he venido a buscar algo para que el coma, aunque creo que también debería llevarle un poco de agua- dije mientras terminaba de envolver los alimentos.

Ten, ambos beban esto, les hará recobrar fuerzas, tu aunque no lo creas también estas débil y deberías al menos dormir un poco- el curandero se acerco y me dio el brebaje que estaba preparando. Si me sentía algo débil, pero era solo por falta de descanso, no hice mas que evacuar a las personas esa noche, lo que no genero un gran desgaste para mi.

Muchas gracias, espero que ya pronto dejemos de ser unos invitados para usted- hice una pequeña reverencia antes de salir de la cocina, llevando conmigo los alimentos y el te.

Al regresar encontré a Shion ya incorporado, esa era una buena señal, paulatinamente lograría la recuperación total. Le entregue la servilleta que contenía el arroz y la chuleta y deje los te sobre una pequeña veladora que se encontraba allí, quedando al alcance de ambos.
Me senté en la otra cama y comencé a comer, tenía mucha hambre, no salía mucho de aquella habitación mas que a buscar las medicinas del curandero y el a veces las llevaba para ver como nos encontrábamos.

Shion, no debes agradecerme nada, veras creo que desde que nos vimos en el pantano hubo una conexión entre nosotros, aun no comprendo que fue, pero es como un lazo de her…- no, no podía decir esa palabra, si quizá ese era el sentimiento, una conexión de hermanos, pero yo ya tenía un hermano al que quería matar, no podía denominar a Shion de la misma manera, el era todo lo contrario de mi hermano- de amistad, en donde siempre contaras conmigo, además que sin ti, sin ese poder que manifestaste dudo que yo o que alguna de las personas que nos encontrábamos en la aldea hubiésemos sobrevivido- sonreí al decir esto, yo era la que tenía que agradecer.

Di un sorbo a mi te antes de continuar.

Y sobre los días que hemos estado aquí, han sido 8- deje mi te sobre el velador nuevamente- aunque creo que permaneceremos aquí al menos unos cuantos días mas, el curandero dijo que teníamos que recuperar las fuerzas antes de partir- el hecho de que allá despertado no significa que se encuentre del todo bien.

Deje mi servilleta, que aun contenía un poco de arroz a un lado y me recosté sobre la cama, el sueño se estaba apoderando de mi sin remedio, de momento me daría permiso para descansar unas horas, ya después vería de que forma ayudaría a Shion en su recuperación.

Si me permites Shion, dormiré un rato, puedes dejar las cosas sobre aquel velador en donde esta el te, yo después las llevare a la cocina, si necesitas algo puedes despertarme- dije mientras cerraba los ojos de manera pesada.

por **Shion** Lun Dic 17, 2012 1:03 pm

Yuzuriha respondía a mis preguntas, dándome puntales respuestas, aunque algo podía notar en ella, ahora estaba un poco mas abierta conmigo, poco a poco nos ganábamos mucha mas confianza, nuestro lazo de engrandecía, No podría ser mejor, Ella me decía que no debía agradecerle nada, aun así lo hice, era mi deber y lo menos que podía hacer, al escuchar los días que en los que había dormido me sorprendí... (*8 días... No puede ser, nuestro viaje se retraso demasiado*) pero no debía ser problema, ciertamente no tenia apuro en llegar a Omashu pero aun así me preocupaba no ser lo suficientemente puntal con mi cronograma... Yuzuriha termino de comer, acto seguido se recostó sobre su cama diciéndome algunas palabras... realmente estaba muy cansada, podía entenderla a la perfección...

Mi rostro irradiaba una profunda calma, sonrei con calidez mientras la observaba dormir... No habia podido descansar, lo sabia, merecia dormir todo lo que quisiera... Termine de comer y coloque los instrumentos con los cuales tome mi alimento en el velador... Permaneci sentado en la cama observando el sueño Yuzuriha, Nos pareciamos tanto en ciertos aspectos... En su cama habia una manta, sin preguntarle por miedo a despertar su sueño tome la misma y la coloque encima de su cuerpo protegiéndola de las corrientes frias del Aire... Estando de pie cargue mi armadura en mi espalda la cual se encontraba cubierta por mi manta, con cuidado abri la puerta para no hacer ruido... Poco despues sali de la habitacion y posteriormente de la cabaña sin hacer mucho alboroto, tal parece, nadie anticipo mi salida...

Con mi pecho desnudo mi cuerpo solo era cubierto por mis pantalones y la blanca manta que al son del viento baila en mi espalda... Mis pies descalzos eran acariciados por el pasto y las flores que en el mismo crecian... camine y camine por el enorme campo de flores hasta llegar a un lugar bastante alejado de la aldea... La calidez del viento soplaba por el contorno de mi rostro termina detras de mi cabellera batiendo esta con su bailar... Solte mi caja en el suelo dejandola en frente de mi... Aquella expresión en mi rostro aun permanecía en el... Mi calida sonrisa... Me arrodille en frente d emi armadura destapando su caja y sacando la misma de esta... su contenedor.

-Armadura de Aries... Sigues con vida a pesar de haber sufrido tantas batallas...

Una herramientas estaba dentro de la caja, un lado era filoso y el otro carecía de cualquier filo... Mis muñecas estaban vendadas, descubrí la piel alrededor de mis muñecas retirando las vendas de la misma, tome aquella herramienta con mi mano derecha, con su lado mas filoso corte mi muñeca izquierda justo en las venas... La sangre cayo desde mi muñeca bañando la armadura con aquel color carmesí... La esencia del alma, la sangre aquella capaz de curar y purificar cualquier cosa sobre el mundo... Posteriomente vende mi muñeca izquierda para así detener el sangrado y luego cortar mi muñeca derecha. Mi armadura estaba totalmente cubierta de Sangre al pasar los segundos esta comenzó a ser absorbida por el oro de mi armadura, no tardaría mucho para que esta comenzara a recuperar su brillo...

Aquella herramienta con la que corte mis muñecas me serviría para regar la sangre por la armadura reparando y pegando cada parte o grieta que quedara en esta... Al pasar los minutos termine de reparar mi armadura, 40 minutos mas o menos debí tardar en cumplir con la restauración de la misma... Vende mis muñecas, aquellas vendas blancas estaban teñidas de color rojo sangre... Cerre mis ojos y sonrei... El talento nato que vivia en mi... tal y como mi padre lo decia... es ahora cuando por fin lo comprendí... Permaneci arrodillado frente a mi armadura, comencé una meditación profunda para elevar mi energía haciendo brilla mi Armadura...

por **Yuzuriha** Lun Dic 17, 2012 4:06 pm

Al cerrar mis ojos el sueño se apodero de mi en unos instantes, a pesar de todo aquello que había pasado y la necesidad que tenía de dormir, mi sueño no fue profundo, lo que produjo que soñara…era similar a los sueños que solía tener, mucho fuego, llamas, ciudades y aldeas abrazadas por el fuego, siempre veía a mi hermano en medio de aquellas llamas, sonriendo. Pero había algo distinto esta vez, una flecha…algo disipaba las llamas, ya no veía a mi hermano, ya no veía llamas…

Abrí mis ojos, mi cabeza me dolía mucho, me mantuve recostada unos minutos tratando de imaginar que podría ser aquel sueño, podía comprender que las llamas hablaban de la nación del fuego y que mi hermano estaba involucrado en la destrucción, a pesar de ser un maestro tierra.
Pero ¿Qué era esa flecha?, en mis otras pesadillas, seguían las llamas y la destrucción no era contenida con nada.

Me incorpore dejando a un lado una manta que no recordaba haber utilizado para cubrirme y vi que Shion no estaba ahí, tampoco estaba su armadura, en ese momento pude sentir una calidez irradiada desde un lugar algo alejado de allí…por alguna razón supe que era el.

Tome los implementos usados para comer y me dirigí a la cocina, limpie lo que se había utilizado y note que el curandero no estaba a la vista, quizá había ido por algunas flores o hierbas medicinales.

Por algún extraño motivo no me preocupaba la seguridad de Shion, de cierta forma sentía esa calidez que se hacia sentir en el ambiente, era como la calidez que irradiaba mi armadura.
Mientras caminaba de regreso a la habitación, pude observar un brillo, era de donde provenía la calidez

Di un suspiro y camine en dirección a ese brillo, estaba bien que ya había despertado y se sentía algo mejor, pero eso no le daba el permiso de salir de la casa en la que nos hospedábamos, menos aun salir de la aldea llevando su armadura, estaba en un proceso de recuperación y debía cuidarse si quería sanar de manera completa y rápida.
Al pisar sobre aquel camino de flores me sentí en una paz y armonía, ese lugar irradiaba paz, no era para menos, era un lugar de sanación y esos dos aspectos: paz y armonía eran cruciales en la sanación de cualquier herida.

Llegue al final del sendero que daba fin a la aldea y pude ver a Shion arrodillado frente a su armadura, el me daba la espalda y podía apreciar que su armadura había recuperado su brillo anterior, ¿Cómo era eso posible?, hace un rato estaba opaca y ahora ahí estaba, incluso mas brillante de lo que imaginaba.

Observe a Shion y vi que los vendajes de sus muñecas estaban ensangrentados, me aproxime rápidamente hacia el, la energía que emanaba de su cuerpo hacia palpitar el brillo de la armadura, viéndolo de cerca parecía que eran uno.

Mi intención era hablarle, pero parecía que estaba en un estado de meditación y no podía interrumpir aquello, me preocupaban sus heridas, pero de momento no podía hacer nada más que esperar que saliera de ese estado de meditación.

Ya era la segunda vez que Shion me preocupaba de esa manera, si que se merecía unos cuantos regaños… de verdad si que ya lo estimaba como a un hermano, me cruce de brazos quedándome en absoluto silencio esperando nuevamente.

por **Shion** Lun Dic 17, 2012 9:20 pm

Luces... eso era todo lo que podía apreciar en mi meditación, era hermoso poder apreciar tal cantidad de energía vestida de hermosos colores brillantes bailando al son del universo y todo pasando por mi tercer ojo, aquel por el cual podia sentir todas y cada unas de las vibraciones energéticas siempre y cuando estuviera dispuesto, en paz espiritual conmigo y con el universo... Entre tantos colores uno prevalecía dando presencia a una gran entidad, Mi Armadura de Aries, de Color dorado y brillante, Me hacia saber de su recuperación, es esto a lo que solía llamar "La voz de las Sagradas Armaduras", Ellas en realidad poseían vida mas allá de cualquier ilusión y para mi era mas que un Honor ser el portador de la primera constelación del Zodiaco... Aries...

En medio de mi profunda meditación no podía saber cuanto tiempo estaría sumergido en la misma, quizás pasaron minutos u Horas, como dije, se me hacia imposible llevar algun control y tal vez eso era lo bello de meditar, perderse en el Tiempo siendo uno con el, dejándome llevar...fluir con la corriente del rio de la vida... Una energía fuerte y decidida se hizo presente en el lugar, conocería ese Chi donde fuera... Era Yuzuriha, ya había despertado y al parecer no le gusto el hecho de no encontrarme reposando...

Me di mevia vuelta regresando de a poco de mi trance, Abri mis ojos y lo primero que vi fue su rostro, casi como esperando para decirme algo, podia imaginar que era asi que me prepare... Sonrei levemente y a la vez preocupado... Era un momento un tanto gracioso a mi parecer...

-... Yuzuriha? Hola, Que haces Aqui? Jeje...

Continue viendo su rostro esperando alguna respuesta, el viento era mas amable, no tenia idea cuanto tiempo habia pasado pero ya el Sol habia bajado un poco del cielo...

por **Yuzuriha** Mar Dic 18, 2012 7:33 am

Ahí seguía de pie con mis brazos cruzados, la seriedad invadía mi rostro, el cual era imperturbable, eso era algo que podía hacer de vez en cuando, sobre todo cuando era joven con mi hermano, esa expresión de impasibilidad lo perturbaba, siempre quería saber que pensaba, anticiparse a mis acciones, el podía ser un maestro, pero yo lo hacia enfadar al no permitirle anticipar mis acciones, pero a veces las emociones no fluían en mi, sobre todo cuando las sensaciones que sentía eran de molestia o preocupación. .

Continuaba observando a Shion, ya había pasado unos minutos desde que había llegado ahí y ciertamente no sabia desde que tiempo el estaba en ese estado.
No me parecía bien que se hubiese levantado tan pronto, tenia que descansar, pero podía comprender en cierto sentido su motivación, hasta a mi me impacto ver su armadura en ese estado, no podía imaginar como se sentía el, viendo aquel objeto… no, no era un objeto, aquella parte de el en esa condición.

Pero eso no lo justificaba, ¿de que iba a servir su armadura si el no se recuperaba?, el tiempo que había pasado dormido fue demasiado, a mi parecer, para ser un simple agotamiento y el aun no entendía que tenía que cuidarse.
Su energía se hacia sentir con fuerza en el lugar y su armadura ya tenía el brillo de antes. No sabía lo que había hecho, pero podía hacerme una idea.

Mientras lo observaba el comenzó a romper su meditación se volteo hacia donde estaba y abrió sus ojos. Hice una mueca con la boca sin perder mi expresión seria, ni mi esquema corporal.

Su expresión casi rompe mi seriedad, se veía algo asustado, aunque sonreía, la expresión era similar a la que ponen los niños cuando se les sorprende haciendo algo que no debían, creo que ya se imaginaba lo que le iba a decir, era más que obvio que no iba a aprobar lo que estaba haciendo.
Y su saludo me pareció gracioso así que se dibujo en mi rostro una sonrisa sarcástica, si me causaba gracia aquello, pero mi sonrisa no demostraría aprobación.

Hola Shion, yo soy la que debería preguntar que haces aquí ¿no lo crees?- lo observe fijamente, su expresión continuaba igual- estoy aquí por un gran motivo: tú, el que tú estés aquí. Al parecer restauraste tu armadura- dije mientras avanzaba hacia su armadura, quedando frente a el- pero eso podía esperar, pasaste 8 días dormido, no creo que fuera muy prudente de tu parte salir así de la aldea, cargando tu armadura en un lugar que no conoces. Y también me pregunto que le paso a tus muñecas-dije señalándolas con un movimiento de cabeza- esas heridas son recientes ¿qué fue lo que hiciste?

Si me estaba comportando como una hermana mayor, regañando las acciones de su hermano menor. Se que quizá eso le molestara a Shion, pero en verdad me preocupaba por su seguridad y a el parecía no importarle mucho, al menos así lo expresaba con sus acciones.

Espere en silencio su respuesta, mientras el sol ya decaía, el día en unas horas se iría y el viento se hacía más fuerte en aquel lugar, generando que el aroma de las flores fuese mas intenso de lo que ya era.

por **Shion** Miér Dic 19, 2012 4:54 pm

¿Como podria no estar nervioso? Jeje... Yuzuriha respondia a mi Saludo con un gran Llamado de Atencion y tenia toda la Razon, despues de todo quizas fui imprudente al venir y reparar mi Armadura yo solo en un lugar, como ella decia desconocido para mi, nosotros. Yuzuriha se acerco a mi armadura, luego de pronunciar algunas palabras señalando mis ensangrentadas muñecas con un sutil movimiento en su cabeza... El sol ya comenzaba a caer un poco eso permitia que el viento se tornaba un poco mas violento aun sin perder la serenidad que el mismo expresaba... Un largo mechon de cabello cubrio mi rostro, con mi mano derecha despeje este colocandolo detras de mi oreja, vi a los ojos a Yuzuriha mientras aun estaba sentado en el suelo... Mi mano se poso detras de mi cabeza y con una gran Sonrisa le dije...

- Si... Tienes toda la razon... Que descuidado eh sido pero... No podia dejar a la otra mitad de mi cuerpo morir...-Cerre mis ojos y voltee la mirada hacia mi armadura- Ella es mi complemento... Al usarla es como si una parte de mi viviera en ella... Se que no le puedo fallar pase lo que lo pase... Ella es parte de mi esencia...

El viento contiuba soplando con fuerza observe mi reluciente armadura por unos segundos mas para regresar el centro de mi atencion hacia Yuzuriha nuevamente, Sus ojos... expresaban mandato, liderazgo y aprecio... Los mios... Eran como los de un joven que expresaba respeto y aprecio... Esta sensacion se llama lazo... Y vivirlo, sentirlo es lo mas lindo que hay en el mundo... Es lo que nos hace sentir vivos, ser humanos... No hay nada mas hermoso... Con mi mano derecha tome mi muñeca izquierda llevandola cerca de mi rostro... Con una sonrisa en mi rostro y aquella mirada tan apacible...

-Desde que nací mi padre solía decir que mi sangre era especial... capaz de sanar las heridas del Mal... Es ahora que lo entiendo... Yuzuriha, con mi sangre repare mi armadura, no me preguntes como porque solo se que al bañarla la esencia de mi Alma va con ella... Haciéndonos uno...

El viento aun soplaba al son de la musica natural... aquella musica que no se podia escuchar pero sin duda podiamos sentir, en nuestros corazones... Estaba algo pálido, habia perdido una cantidad considerable de sangre, sin embargo esto no causaba mayor efecto en mi... Esto era lo que mucho llamaban "Talento Nato" es algo que no eliges... En realidad es algo que te elige a ti incluso antes de nacer... Me sentía bendecido... No es para menos...

-Eh sido un tonto por preocuparte tanto Yuzuriha Jeje... ¿Que puedo hacer para recompensarte? Me sentiria mal si no aceptas

Al terminar de pronunciar mis palabras sonreí con gentileza, cualquier cosa que ella me pidiera lo cumpliría sin importar, se lo merece, ha sido una excelente compañera...

por **Yuzuriha** Miér Dic 19, 2012 10:00 pm

Después de oír aquella palabras de Shion, lo comprendía, pero si había demostrado mucho descuido, sabía que su armadura era importante, no creía que a tal nivel, el tenía un lazo mas fuerte con su armadura que la que yo tenía con la mía, quizá en algún momento en el futuro haría lo mismo que el, no lo podía culpar ni enjuiciar por aquello.

Nuestra armadura era parte de nosotros, no podíamos dejarla que le pasara algo, porque aunque costara comprenderlo, era algo vivo que vibraba junto a nosotros.

Y era increíble que aun mantuviera su sonrisa, solía ser intimidante, pero ahí estaba el, sonriendo. De verdad sentía un lazo, aunque detestara imaginarlo, si era un lazo como el que yo tenía con Tokusa, no ese lazo no era tan fuerte como el que sentía por Shion. Mi hermano era altanero muchas veces, si lo quería, pero su actitud levantaba un muro aun más fuerte que los que podía levantar su control. El aprecio que sentía por este joven imprudente era más grande.

El siguió hablando y nombro a su padre, por la expresión que mostraron sus ojos por unos instantes, parecía como la sombra de un ave que recorre el cielo proyectada en la tierra, y comprendí que el quizá ya no estaba entre los vivos. Era una pena, tal vez el estaba igual de solo que yo, al parecer teníamos dolores similares.

¿Sanar heridas del mal? que su sangre era especial, pero ¿quien le dice eso a un hijo?, acaso esto va mucho mas allá de los controles del agua, fuego y tierra, no podía nombrar el aire ya que este se había extinguido junto a los nómadas. ¿Era algo mucho mas serio poseer una armadura? Si, si lo era, porque no es algo que simplemente controlas como un elemento de la naturaleza, el cual respetas…la armadura va más allá, late, vive y siente. Como es que todo esto llegaba a mi, yo con suerte tenía experiencia con un tipo de control y fue por ser criada junto a maestros. Pero la armadura seguía siendo algo nuevo e incomprensible para mi, aunque Shion ya me había explicado en que consistían, no tenia el nivel de comprensión que el poseía.

Me perturbaba y preocupaba en cierta forma que el se hubiese herido con tal de que su armadura volviera a relucir llena de vida, mis ojos perdieron la expresión dura que tenían, siendo reemplazada por una sorpresa manifiesta al entender todo y ver aquellas muñecas que tenían aquel vendaje ensangrentado, no tenía la más minima idea de cuanta sangre era necesaria para hacer aquello, pero de seguro era mucha. Shion estaba pálido, aparte de estar débil por el agotamiento de salvar a una aldea se había cortado sus muñecas perdiendo así mucha sangre.
Pero no podía debatir que el y su armadura eran uno, eso lo pude ver aquella noche…

Sonreí cuando acepto su torpeza y responsabilidad por su seguridad. El viento acariciaba con más fuerza aquel paraje, haciendo que mi bufanda se dejara llevar también. La enrolle a mi cuello mientras seguía escuchando a Shion. Ya era hora de regresar a la cabaña que nos daba albergue.

Si haz sido un tonto, pero comprendo tus acciones- dije mientras me aproximaba a su armadura viéndola más de cerca- y lo que puedes hacer por mi son cosas muy simples- dije mientras sonreía junto con el- guardar tu armadura, pero yo la llevare, regresar a aquella cabaña, comer, tomar lo que el curandero te de y descansar como se debe, al menos un día.

Le extendí mi mano para que se pusiera de pie.

Y no volver a preocuparme de esta forma- ya el sol se estaba escondiendo en el horizonte y comenzaba a hacer frío- eso es lo único que aceptaría como recompensa, que te cuidaras.

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