El entrenamiento secreto de Natsumi

por **Natsumi** Lun Dic 17, 2012 10:50 pm

El sol de las doce del mediodía resplandecía sin piedad sobre las copas de los arboles del bosque. Natsumi estaba agradecida de la existencia de aquel bosque, no solo por que mantenía los rayos del sol a una prudente distancia, sino también porque le daba la posibilidad de practicar las técnicas que el Señor Fuwashi le enseñaba siempre que tenía tiempo libre.
Se sentó sobre la tierra, era un ejercicio que el Señor Fuwashi le había insistido que no dejara de hacer. Una vez allí sentada, cerraba los ojos, inhalaba el aire por la nariz y exhalaba por la boca a modo de encontrar la calma y bajar el ritmo de su respiración para sentir la tierra con fuerza dentro de sí misma.
Al cerrar los ojos se sorprendió sintiendo el palpitar de su corazón al ritmo de las vibraciones de la tierra.
Abrió los ojos de repente, fascinada con esta sensación ya que nunca antes lo había logrado.
"¡Increíble!" Exclamó levantándose con un salto de emoción y alegría "Debo contarle esto al Señor Fuwashi"
Corrió de vuelta a la Aldea hacia la casa Fuwashi pero se detuvo al instante, recordando las palabras de su Maestro.
"Natsumi, debes practicar y practicar arduamente todos los días, no solo cuando yo lo disponga. Encuentra tiempo para ti y practica" la voz serena del Señor Fuwashi calmaba la ansiedad de Natsumi siempre.
Él era como un padre para la joven, un segundo padre más bien, ya que no podía nunca reemplazar a Ryok, su verdadero padre, un maestro tierra que había abandonado el hogar para servir a su nación.
Ante los tristes recuerdos la expresión de Natsumi pareció oscurecerse, pero solo fue por un segundo, al instante levantó un puño al cielo y dijo:
"Padre, Sifu Fuwashi, no los defraudaré" sonrió más animada.
A continuación, una vez terminada la meditación, se encargó de practicar hasta el cansancio las técnicas que su Maestro le había enseñado.
El sol ya se había movido de su punto máximo y el viento comenzó a soplar una suave brisa secando poco a poco las gotas de sudor que ocupaban la frente de la muchacha.
"Ya es hora de volver a casa" dijo, y sin darse cuenta caminó hasta la casa donde vivía su madre.
Había luz dentro de la casa, pero ella sabía que no era bienvenida en esa casa.
Se quedó de pie frente a la puerta, sin llorar, sin mostrar señales de enfado.
Luego de un rato, volvió sobre sus pasos hacia el bosque, su nuevo hogar desde que su madre la echara de casa.
Su madre, Kyo, era una mujer no-maestra y la detesteba profundamente. No había dudas sobre ello.
Natsumi estaba segura que su madre la detestaba por querer hacer tierra control, como su padre. Pero también sospechaba que había otro motivo el cual ella ignoraba por el momento.
De nuevo en las profundidades del bosque, Natsumi se recostó sobre unas hojas, mirando el cielo, pensativa.
"Algún día, todo va a cambiar, lo sé. Voy a hacer lo que esté a mi alcance para que así sea" se aseguró a sí misma.
Pero no tuvo tiempo ya de pensar, cerca se pudo oír el crujir de las ramas sobre el suelo.
Alarmada se incorporó al instante.
¿Qué o quién se acercaba allí?

por **Natsumi** Miér Dic 19, 2012 11:39 pm

Natsumi estaba alerta, sabía que había alguien más allí y sin embargo ese alguien (o algo) no parecía querer mostrarse.
"Quien quiera que esté ahí, ¡que de la cara!" dijo con voz fuerte y clara, aunque su corazón latía velozmente con temor.
De los frondosos árboles salió una rápida sombra que solo pudo ser identificada una vez que estuvo frente a la joven aprendiz.
"Tranquila, Natsumi, he venido por orden del Señor Fuwashi" Se trataba de Sohey, el mensajero exclusivo de la casa Fuwashi.
"¿Ha pasado algo?" quiso saber ella, preocupada.
Su preocupación máxima era que la nación del fuego atacara la casa de su maestro, tal y como estaban las cosas, no era para nada delirante pensar en ello.
"Aún no, pero me temo que la familia Fuwashi se encuentra en gran peligro. Por eso el Señor me pidió que te diera esto antes de irse" con gesto confidencial le entregó un pergamino muy bien cerrado.
Natsumi tomó el pergamino entre sus manos, con gesto solemne.
"¿La familia Fuwashi en peligro?" repitió, shockeada. "¿Cuando se han ido, Sohey? ¿Te ha dicho algo más o dejado algún otro objeto?" indagó, recobrandose del shock.
Sohey negó tristemente con la cabeza.
"Lo siento, Natsumi pero eso es todo lo que me se" la miró a los ojos, con compasión "Escucha, se que no debería entrometerme pero creo que será mejor que te vayas de esta aldea. Ya no es un lugar seguro."
"Pero..." dejó de hablar al instante que pronunciaba su queja. Realmente no tenía argumentos. Con la familia Fuwashi huyendo y su madre que todavía la despreciaba, no tenía nada que hacer allí en esa aldea. Sin maestro, sin familia, debía hacer algo rápido para no caer en la desesperación y poder aprender cada vez más sobre la tierra-control.
"Esta bien, Sohey. Gracias por tu consejo, deberías hacer lo mismo" la joven le sonrió agradecida al mensajero y se alejó, adentrándose más por el bosque.
El entrenamiento se había terminado. Su trabajo en la casa Fuwashi también. Ahora lo único que le quedaba era seguir adelante.

El entrenamiento secreto de Natsumi

El entrenamiento secreto de Natsumi

Re: El entrenamiento secreto de Natsumi